Cuando nuestra salud se encuentra comprometida hablamos de una enfermedad. Esta puede ser aguda (cuando se sufre temporalmente) o crónica (cuando se convive con ella). Para ambos tipos de enfermedades suelen haber medicamentos, terapias o tratamientos para intentar aliviar el padecimiento. Sin embargo, hay un grupo heterogéneo de personas que no cuentan con tratamientos paliativos eficaces a ciertas enfermedades crónicas. Hablamos de los que padecen las llamadas Enfermedades Raras.
Se considera una enfermedad rara aquella afección que sufre un número muy pequeño de personas (1 de cada 100.000 personas, según la OMS). Existen entre 6.000 y 8.000 enfermedades raras conocidas, y es por eso que, aunque aparecen rara vez, constituyen un porcentaje importante de la población. Se estima que en Latinoamérica y el Caribe, por ejemplo, la población con enfermedades raras asciende hasta 50.000.000 de personas.
Debido a que son pocos los pacientes que sufren una determinada enfermedad rara, no existe ni conciencia pública ni políticas sanitarias para hacerles frente. Las investigaciones son muy limitadas y además no representan una cuota de mercado atractiva para la industria farmacéutica. Los pacientes están en una posición realmente vulnerable.
De entre los miles de casos y testimonios, a veces muy tristes y otras veces motivadores, les quiero contar de la enfermedad que sufre Mandy Sellars (Reino Unido, 1975). Esta chica nació con una extraña condición en la cual sus piernas eran muy largas, gordas, asimétricas y sus pies deformes. Y no paraban de crecer. Los médicos les advirtieron a los padres que no caminaría y que su esperanza de vida era muy corta. Sin embargo, aprendió a caminar, fue a la escuela y aún sigue vivita y coleando. (El documental de su historia lo vi en NatGeo y está disponible aquí)
Llevando una vida relativamente normal (estudios, amigos,…) a la edad de 30 años sufrió una infección severa en una de sus inmensas extremidades, lo que conllevó a la amputación de su pierna izquierda. Tuvo que aprender a caminar con una prótesis, pero al fin y al cabo ¡se había desecho de esa incómoda y perturbadora extremidad! Pero no, el muñón no tardó en empezar a crecer descontroladamente hasta que, en pocos meses, alcanzó una circunferencia de 3 metros :-O
Durante toda su vida, los médicos no encontraban una causa de su enfermedad, por lo tanto nunca pudo contar con un tratamiento eficaz. A pesar de ello, siempre fue una mujer luchadora, incansable y carismática, pudiendo llegar a los medios de comunicación de su país y hacer conocida su enfermedad. Fue entonces cuando suscitó el interés de los médicos que se pusieron manos a la obra con el diagnóstico.
Extrajeron el ADN de sus tejidos afectados, secuenciaron su genoma y encontraron la causa. Había una alteración puntual en la secuencia de su ADN (o sea, una mutación, como en el 80 % de las enfermedades raras). Tan solo 1 cambio en los 3.200 millones de sitios posibles del ADN, en 1 de los aproximadamente 20.000 genes del genoma humano. Su gen PIK3CA está mutado en las células de sus piernas.
Lo que probablemente le haya pasado fue que, por (mala) suerte, el tejido embrionario que daría origen a sus extremidades inferiores tuvo un error al dividirse y no fue corregido por mecanismos moleculares naturales. Así que el defecto se expandió a todas las células hijas que formaron los tejidos de sus piernas. Nació con el defecto pero no lo heredó, todo ocurrió cuando era un cigoto. Hablamos entonces que Mandy Sellars sufre de un mosaicismo genético, condición en la que conviven dos tipos de poblaciones celulares genéticamente distintas en su cuerpo.
Ese cambio, error, o mutación, hace que el gen produzca una proteína defectuosa. De los 1.068 aminoácidos que constituyen la proteína PIK3CA, solamente 1 (¡UNO!) es diferente en las piernas de Mandy Sellars. Un fenómeno conocido como mutación con cambio de sentido.
La proteína PIK3CA está conservada en todos los eucariotas, participando en procesos vitales e intrincados de señalización celular que finalmente promueven la sobrevivencia celular, el crecimiento celular, la proliferación celular, angiogénesis, migración e invasión celular. De hecho, como ya se podrán imaginar algunos, PIK3CA es un oncogen que está recibiendo mucha atención en las investigaciones oncológicas. (Aquí está disponible una animación de esa vía de señalización celular).
La proteína defectuosa en las piernas de Mandy Sellars está sobre activada. Independientemente de las señales extracelulares que la harían activarse (energía, oxígeno, nutrientes, factores de crecimiento) ella siempre está activa y transmitiendo señales de crecimiento constantemente. No para de hacerlo. Su mutación es de ganancia de función. Y el resultado más visible de ello salta a la vista.
Hace menos de 3 años fue que se dilucidó la cusa de su rara enfermedad e inmediatamente sus médicos propusieron un tratamiento razonable (¡Esta es la parte más emocionante de esta historia!): En el mismo año que Mandy Sellars nacía (1975), unos empleados de la compañía Wyeth vacacionaban en Isla de Pascua (isla Rapa Nui en la lengua local) y recogieron muestras de suelo con miras a aislar microorganismos prometedores para aplicaciones biotecnológicas. Según contó en su blog J.M. Mulet, esa era una política de empresa, que los empleados recogieran muestras de suelo de cuanto lugar visiten. Una viveza formidable ¡Y mira si les ha funcionado!
De aquellas muestras aislaron una bacteria, Streptomyces hygroscopycus, que era capaz de inhibir el crecimiento de hongos. El principio activo, un poderoso antibiótico antifúngico, fue aislado, caracterizado y nombrado Rapamicina, en honor a la isla. En los años siguientes se descubrió que también afectaba las células de mamíferos, poseyendo propiedades inmunosupresoras y antiproliferativas. Las investigaciones biomédicas en este campo crecieron sin cesar y se llegó a describir cómo la rapamicina bloquea la acción de una proteína llamada mTOR (por mammalian Target Of Rapamycin) que participa en la vía de señalización de PIK3CA (¿lo van pillando? Se va uniendo el rompecabezas).
Como información adicional, se ha descrito también que la Rapamicina combate el envejecimiento, retrasa la aparición de enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer o Parkinson, y las enfermedades metabólicas como algunos tipos de diabetes. Pero el mayor interés biomédico radica en su potencial anticancerígeno, como agente quimioterapéutico para varios tipos de tumores y su acción inmunosupresora en pacientes transplantados. Una droga, muchos efectos.
Un tratamiento inmediato para Mandy Sellars sería entonces bloquear la sobre activación de la vía de señalización de PIK3CA con Rapamicina. Y así se hizo. Y según leo en su propia página web y diversos medios de comunicación que hicieron eco de la noticia, las pastillas de rapamicina no solo han parado el crecimiento de sus piernas, si no que empiezan a disminuir de tamaño lentamente. Sin duda el mejor pronóstico posible para esta motivadora chica.
Para intentar entender qué le pasa y cómo funciona el tratamiento, he esquematizado (grosso modo y didáctico) los principales eventos moleculares implicados en su rara enfermedad y la acción de la rapamicina en todo este rollo.
Hemos visto entonces cómo el descubrimiento por serendipia, fortuito y de chiripa de la Rapamicina está llenando de esperanzas a Mandy Sellars. Una prueba más de que la investigación básica es absolutamente necesaria para los avances científicos y biomédicos de la humanidad. Más aun teniendo una lista de miles y miles de enfermedades raras cuyos portadores ven pasar los días sin ningún tipo de esperanzas. Se hace obvia también la necesidad de un diagnóstico eficaz y estudios personalizados a dichos pacientes, lo que sin duda redundaría en aliviar su sufrimiento, el de sus familias y ayudaría a disminuir las tasas de morbilidad.
Consiente de toda esta problemática, y sabiendo que existen salidas (a largo plazo y costosas, pero soluciones al fin), me he unido a la campaña de la Federación Española de Enfermedades Raras en la conmemoración del Día Internacional de las Enfermedades Raras este viernes 28 de febrero, para dar visibilidad al caso de Mandy Sellars y su buen pronóstico actual.
¿No es acaso una historia fascinante?
¿Estarías dispuesto(a) a apoyar esta campaña difundiendo esta entrada en las redes sociales? O mejor aún ¿apoyar y ser socio de FEDER? Haz click en el logo de Semillas de Esperanza:
Para saber más de la historia y pormenores de Mandy Sellars:
Claude Vezina, Alicia Kudelski y S. N. Sehgal (1975) Rapamycin (AY-22.989) a new antifungal antibiotic. The Journal of Antibiotics 721-726.
Ghayda Mirzaa, Rob Conway, John Graham y William Dobyns (2013) PIK3CA-related segmental overgrowth. Gene Reviews [Internet]. Seattle (WA): University of Washington, Seattle.
Jing Li, Sang Gyun Kim y John Blenis (2014). Rapamycin: one drug, many effects. Cell Metabolism http://dx.doi.org/10.1016/j.cmet.2014.01.001
Shin Ogita y patricia LoRusso (2011) Targeting phosphatidylinositol 3 kinase (PI3K)-Akt beyond rapalogs. Targ Oncol 6: 103-117.
hola soy de la argentina y necesito saber si aca cuento con especialistas que me puedan decir que hacer con la gordura de mis piernas , si bien no tengo al extremo de otros casos si puedo decir que todo los que es muslo hasta debajo de la rodilla y sobre todo en la cara interna tengo como una pelota, de ahi para abajo son totalmente normales,. Gracias por cuanto informacion puedan facilitarme.-
Hola Ruth,
Por favor acude a tu médico de cabecera. Seguramente él podrá ayudarte y orientarte más de lo que yo podría. Me encantaría hacerlo, pero desconozco especialistas en esto.
Un fuerte abrazo y ¡mucho ánimo!
buenass holaa que felizz me encuentroo por esaa maravillosaa noticiaaaa peroo tambienn desesperadaa por ayudaa mi hija sufree el mismo sindrome de mandyy sindrome de proteuss tiene algunos tumores y gigantismo de sus pies y deformidad ella tiene 11 anoss mi niñaa es muy inteligentee y quisiera sabberr si hayy alguna fundacionn o algoo asii con que me pueda comunicarr por favorrrrr ayudenmeeeeee
no a miii a mi ninñaaa
¡Hola Dayana!
Me solidarizo contigo y tu familia por la situación, a la vez que reconozco tu fortaleza para seguir en la búsqueda de tratamientos que alivien la condición de tu hija. Como padre, puedo imaginar (y sentir angustia) por la situación.
Ahora mismo no tengo las herramientas para ayudarte. Pero te prometo que te echaré una mano en todo lo que pueda. Seguimos en contacto por correo electrónico.
¡Un fuerte abrazo!
Felicidades a los empleados y científicos de Wyeth. Porque dan esperanza de calidad de vida a las personas. Smuack, smuack, smuack!!!
Hola Itzy! Si bien es cierto que muchos de los medicamentos comerciales son vitales, también es verdad que ellos invertirán siempre y cuando haya mercado (pacientes) suficientes que lo justifiquen. Es parte de la industria. Saludos!
extraordinario descubrimiento, la mayoria de los medicamento son de origen natural, hay estan, pero el verdadero valor de estos, esta en la investigacion de los grandes laboratorios que estan dispuestos ha investigar e invertir, para tener estos logros felicidades a wyeth y a sus empleados por haber descubierti la rapacimina
¡Hola, Emiliano!
Sin duda fue un descubrimiento formidable. Y lo más inquietante es pensar en todo lo que falta por descubrir. Eso lo saben muy bien las farmacéuticas, quienes no escatiman en invertir en este campo. Saludos.